Escuelas Pías publican «Ven a morir a casa», una banda sonora para una película inexistente
El dúo sevillano Escuelas Pías regresa con su cuarto álbum de estudio, Ven a morir a casa, un trabajo concebido como la banda sonora de un film de terror que nunca llegó a rodarse. Una suerte de ópera pop con tintes de rock y pasajes instrumentales que refuerzan su particular imaginario, a medio camino entre el terror cósmico, el drama psicológico y el horror doméstico.
Tras varios EPs, tres LPs y diferentes proyectos paralelos, Cristian Bohórquez y Davis Rodríguez siguen expandiendo su universo creativo sin miedo a experimentar. En este nuevo disco plantean un viaje cinematográfico en el que el oyente se convierte en espectador y director al mismo tiempo: cada canción funciona como una escena de una película inventada, poblada de tres personajes atrapados durante tres décadas en una pesadilla dominada por un ente superior que manipula la realidad y la memoria.
Ven a morir a casa se articula en ocho composiciones que incluyen temas pop en la tradición más melódica del grupo, piezas instrumentales y un corte final concebido como la balada de créditos. Aunque cada canción puede sostenerse por sí misma, su verdadero sentido surge al escucharlas como un todo, entrelazadas en forma de banda sonora.
Las referencias son explícitas: de John Carpenter a Goblin, de Tangerine Dream a Ennio Morricone, pasando por Angelo Badalamenti o Disasterpeace. Pero lejos de quedarse en el guiño, Escuelas Pías filtran estas influencias a través de su estilo característico: un pop delicado, lírico y atmosférico, marcado por melodías que oscilan entre la luz y la sombra, con letras cargadas de imágenes fantasmagóricas.
El disco se publica en formato digital exclusivamente y ha sido grabado en los estudios La Mina (Granada) junto al productor Raúl Pérez, habitual colaborador de la banda. Con Ven a morir a casa, Escuelas Pías entregan una obra que desafía las etiquetas y propone al oyente un juego de imaginación: construir su propia película mental guiada por una música extraviada, inquietante y luminosa a la vez.